Buzón de Alcance 220

18 – Equipo directivo: debe ser el motor que promueve un liderazgo compartido , generar ilusión, dar a los compa- ñeros la oportunidad de ocupar posiciones en las que puedan brillar, vencer desde el convencimiento y dar visi- bilidad al esfuerzo del grupo, es importante que, de puer- tas afuera, se reconozca a un claustro comprometido. – Profesorado: sin ellos, obviamente, no hay proyecto (conviene no pasar esto por alto). Es fundamental que se sientan seguros y respaldados, la formación es la clave: en nuestro caso, el programa #CompDigEdu nos brindó la oportunidad de traer la formación al centro, lo cual nos proporcionó una formación suficiente en cuanto a duración y de calidad en cuanto al nivel de las ponencias. Además, en una realidad en la que nuestros claustros pueden sufrir muchos cambios de un curso para otro, estas actividades sirven para estrechar lazos entre los compañeros. La confianza mutua entre los do- centes ha sido esencial para consolidar el proyecto. – Alumnado: protagonistas y destinatarios de todas las actuaciones que realizamos. Han colaborado con ilu- sión desde el primer día y sus aportaciones, sus inte- reses y motivaciones han sido un elemento clave a la hora de ir retroalimentando la implantación del Aula y ajustarla a nuestra realidad. 4. Evaluación: sin saber si se han conseguido los objetivos (en cuanto a los alumnos, los profesores, las herramientas y recursos…), no es posible mejorar. Para la evaluación. hemos utilizado los instrumentos que ya tan bien conoce- mos desde hace unos años: rúbricas y cuestionarios. Así, hemos obtenido información acerca del proceso, el espa- cio, la organización, interés y motivación, etc. Esto nos ha permitido detectar las áreas de mejora: todo proyecto de innovación educativa es un proyecto inacabado, siempre se puede mejorar. Nuestra ilusión es que la innovación sea seña de identidad de nuestro centro: una vez perdamos el miedo al cambio, será parte de la filosofía de la institución. Lo que comenzó con unos proyectos interdisciplinares en español-inglés, ha avanzado hasta la etapa de Educación Infantil, con el denominado “Oran- ge Day” donde nuestro alumnado desde los 3 años trabaja el pensamiento computacional y con el desarrollo de situaciones de aprendizaje que acercan nuestra aula del futuro con el en- torno más cercano, como la denominada “Orange Room y el Huerto del San Juan”. Desde el CEIP San Juan Bautista, estamos convencidas de que la integración de las tecnologías digitales, las metodolo- gías activas y la creación de un Aula del Futuro son claves para una educación de calidad en el siglo XXI. Los resultados están siendo muy satisfactorios: alumnado motivado, aumento de la colaboración y el trabajo en equipo y valoración positiva de las nuevas posibilidades que ofrecen las tecnologías digitales y las metodologías activas para mejorar su práctica docente entre el Claustro y familias que muestran su satisfacción ante las inno- vaciones por las que apostamos desde el colegio. Pero este pequeño proyecto no es lo más importante, para no- sotras, la mayor recompensa es ver cómo es posible tener una idea y, entre todos, hacerla realidad. No podemos dejar que la vida de la Escuela se deje llevar por la inercia. Ojalá a partir de aquí, todos los miembros de la Comunidad Educativa del CEIP San Juan Bautista podamos expresar sin miedo aquello que creemos que nos puede hacer mejorar a nosotros mismos y al colegio. Nuestro alumnado así lo merece. Buzón abierto Estas actividades sirven para estrechar lazos entre los compañeros. La confianza mutua entre los docentes ha sido esencial para consolidar el proyecto

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