Buzón de Alcance 175
B u z ó n a b i e r t o 2 8 Me llamo Paco y soy interino. Mi vecino del quinto, Luis, es un político de profesión. Ocupa un cargo de confianza en un ayunta- miento de nuestra Comunidad. Muchas mañanas nos encontramos en el garaje cuan- do vamos a llevar a los niños a clase. Casi siempre tenemos conversación sobre política. Le gusta que le dé mi opinión sobre las cosas que pasan en nuestra Comunidad. Dice que seré de los pocos que se leen los programas electorales. De hecho, él no se ha leído ni el de su partido. Me dice que teniéndome aquí le es suficiente. Yo le contesto que debo de ser el mayor imbécil del barrio: interino y leyen- do programas… Hoy, como no podría ser de otro modo, hemos hablado de política. Me ha visto un tanto abatido y me ha preguntado qué me pasaba. Luis. ¿Qué te pasa, Paco? Te veo un tanto decaído. Paco. Pues que ayer salió el nuevo decreto de regulación de la lista de interinos. Luis. ¿Y qué pasa con eso? Paco. Hombre, Luis, ¿tú nunca lees lo que pasa en tu comunidad?, eso que eres de deportes. Pues que si no apruebo el examen de oposición este año me voy a la calle, des- pués de veintidós años dando clase. Luis. Pero si tú ya lo has aprobado varias veces, ¿cómo te van a echar a la calle? Además, sé que eres buen profesor. Paco. Pues así es. Como en la convocatoria pasada no pude estudiar, al dar María a luz en febrero y tener que dedicarme a los niños... Si en esta fallo, me voy a la calle. Luis. Esto te pasa por no hacerme caso. Si hubieses seguido en política como yo, con lo que tú prometías, ahora no te pasaría esto. Mírame a mí: no llegué a terminar la carrera y ahora tengo un sueldo de cincuenta mil euros, y sin presentarme a elecciones. Paco. Ya, te entiendo, pero eran incompati- bles, al menos para mí, estudios, matrimonio e hijos. Además, tú sabes que cuando yo pien- so que algo está mal lo digo y esto es otra incompatibilidad. Luis. Bueno, si te echan, siempre puedes vol- ver al calorcito del partido. Fuera hace mucho frío. Paco. Déjate de bromas. La primera vez que me examiné de oposiciones fue en 1991. Saqué una nota de 8,25 puntos, pero no pude aprobar porque estaba el convenio de interi- nos que por tiempo de servicio llegaban a tener hasta seis puntos. Me dieron una inte- rinidad en noviembre y eso me satisfizo. Sabía que acababa de entrar en el sistema. Y desde entonces he ido aprobando en todas las opo- siciones que me he presentado. No me pare- ce justo. Además, sabes que tengo tres títu- los universitarios. Luis. Quizá el problema sea ese, que no estés suficientemente preparado. Paco. Luis, que no está el horno para bollos. Luis. Lo siento, era una broma. Sé de tu pre- paración. Conversaciones con mi vecino Luis En una visita que hice el otro día a un colegio, un interino me contó una historia muy intere- sante, que paso a narrar a continuación.
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