Buzón de Alcance 160

L A N O T I C I A 18 L A rápida actuación de una maestra del colegio Pereanton de Granollers evitó ayer lo que habría podido ser un grave accidente, con una veintena de alumnos de cinco y seis años como víctimas. Al ver que el techo cedía, la profesora simu- ló un juego para que los niños se cobijaran bajo las mesas ante el inmi- nente desprendimiento. Pasaban cinco minutos del mediodía cuando el falso techo del aula de P-5 de la céntrica escuela Pereanton empezó a crujir. La estructura que sujetaba las placas se soltó de los tacos y se desprendió lentamente sobre los 20 alumnos que estaban en clase. Con gran entereza, la maestra ideó un juego a fin de que los niños se guarecieran debajo de las mesas mientras caían dos terceras partes del techo. El grupo fue evacua- do por el resto de profesores. Una maestra salva a sus 20 alumnos al caerse el techo de la clase Granollers, 23 de marzo - Vnews E L Juzgado Penal número 23 ha condenado a dos años de cárcel a Milagros F. G. por pegar a la pro- fesora de Ciencias Sociales de su hija, de 13 años, a la salida del IES “Roger de Flor” de Barcelona. La Fiscal, la acusación particular y la defensa llegaron este miér- coles a una conformidad durante la celebración del jui- cio en la Ciudad de la Justicia. La mujer ha sido condenada por un delito de atentado en concurso ideal con un delito de lesiones y de una falta de amenazas. Su abogado, Ricard Esteban, explicó hoy que su clienta quiso llegar a una conformidad, aunque él con- sidera que “debería haber luchado”, ya que según el letra- do, el delito de atentado sólo tiene lugar cuando la víc- tima es una autoridad y “no en el caso de que se trate de un funcionario público”. “Podríamos llegar al absurdo de que cada vez que un niño desobedezca a un profesor, cometiera un delito de desobediencia”, apuntó. Esteban explicó que la madre no entiende por qué “una pequeña trifulca” ha generado un delito con pena de cárcel. Según su versión, la mujer intentó hablar con la profesora de su hija en varias ocasiones y, al no conse- guirlo, la esperó a la salida del instituto y fue entonces cuando se pelearon. Milagros F. G., que en un principio no quiso declarar ante el juez debido a la gran presen- cia de medios de comunicación, aceptó la pena y no quiso hacer declaraciones. Según el escrito de la Fiscalía, la tarde del 6 de noviem- bre de 2008, Milagros F. G. se acercó a los alrededores del instituto y se abalanzó sobre la profesora, “tirándole del pelo reiteradamente, arrancándole mechones de cabello, arrinconándola al tiempo que la insultaba con palabras soeces” y la amenazaba con matarla. Finalmente la pro- fesora consiguió escapar con ayuda de terceros y refu- giarse en el centro escolar. Por su parte, la profesora abandonó los juzgados visible- mente afectada y tampoco quiso hacer declaraciones. Pere Ciudad, del Defensor del Profesor del sindicato ANPE, explicó hoy que se trata de “una sentencia muy importante” porque la juez ha considerado delito de atentado una agresión a un profesor en ejercicio de sus funciones. “Juicios como el de hoy ponen en evidencia que una agresión a un profesor es un hecho grave, que atenta contra el derecho de educación”, matizó. Explicó que aunque la mujer no ingresará en prisión –ya que la pena es de dos años–, esta sentencia puede servir de “aviso” para que no se repitan situaciones como ésta, que por otro lado, comentó, empiezan a estar “controladas”. Además de la pena de cárcel, la madre ha sido conde- nada a pagar una multa de 120 euros por la falta de amenazas y a indemnizar a la profesora con 8.840 euros por las lesiones y las secuelas. Durante dos años no podrá acercarse a menos de mil metros de la víctima, que ya no trabaja en el instituto porque está jubilada. Por considerarla de interés para nuestros lectores, reproducimos la información difundida por La Razón.es el pasado 23 de marzo y por Europa Press el 7 de abril. Dos años de cárcel a una madre por pegar a la profesora de su hija Sentencia del Juzgado de lo Penal de Barcelona Agredió a la profesora de 1.º ESO, física y verbalmente, a la salida del instituto en presencia de alumnos y vecinos del barrio Barcelona, 7 de abril - Europa Press La clase tras la caída del techo